Oceanis 50 - Beneteau

Elegancia y armonía

Nuevo diseño muy estilizado, firmado por Jean Berret y Olivier Racoupeauy con una cubierta impecable dibujada por el gabinete Italiano Nauta. Todo perfecto como no podía ser de otra manera para el mayor de los nuevos Oceanis, que pudimos descubrir de la mano de uno de los más importantes distribuidores;  Sport-Nautic.

Desde la aparición del primer Oceanis, el 430 diseñado por el genial François Chalain hace ya 20 años, han aparecido muchos modelos en esta sobresaliente saga. Primero fueron los modelos con tres cifras acabados en cero como los Oceanis 320, el Oceanis 350, el 370, el 400 y otros más. Luego fueron los de 3 cifras acabadas con el número uno, diseñados todos ellos por el conocidísimo Jean-Marie Finot, como por ejemplo los 281, el 311, 331 o también el famoso Oceanis 411. Muy recientes son los que acababan en tres como los Oceanis 323, el 373 o el 393, 473, o el superlativo Oceanis 523. Y finalmente parece que volvemos al cero pero con solo dos cifras, aunque esta vez tendremos excepciones…

Nada más verlo nos sorprende la fluidez de las formas de su Rouf que armonizan con las líneas de cubierta totalmente integradas en el diseño exterior. Observamos la actual tendencia trapezoidal de las ventanas, que nos conducen la vista hasta la bañera, en la que apreciamos un nuevo cambio drástico respecto a anteriores modelos. Doble rueda de timón y una enorme y cómoda mesa en el centro de la bañero cuyo frontal sirve de soporte para instalar las ya fundamentales consolas de navegación.

La elevación del escalón en el brigde deck permite integrar las dos puertas que dan acceso a la escalera de bajada al salón y que estando abiertas pasan casi desapercibidas. En todo caso mucho más cómodo que las conocidas panas de toda la vida. Y desde la bañera no tendremos más que desplazar una sección del banco de popa, que se mueve fácilmente con una sola mano mediante un sistema de pantógrafo, para acceder a la plataforma de baño en la que detrás de una puerta se esconde un cofre con la balsa salvavidas accesible de forma cómoda rápida y segura. Detalles y ventajas muy estudiadas, que un gran fabricante puede ofrecer gracias a la gran experiencia acumulada tras poner en el mercado muchos modelos.

Hay espacio y amplitud tanto en el puente como en el interior, lo cual nos permite cambiar de sitio sin realizar posturas forzados. Sorprende la facilidad con la que uno se puede mover en el barco. Lo agradece el cuerpo y todo es más fluido y natural, con anchos pasavantes, y circulación cómoda para pasar del cockpit a la zona de proa. En la bañera y navegando con fuertes escoras, se echan en falta algunos asideros para permitirnos desplazar con más comodidad.

En el interior sorprende de nuevo la elegancia y la gran luminosidad del salón. Todas las ventanas van protegidas con estores que ofrecen intimidad si así lo deseamos y que al plegarse se esconden tras los espacios dedicados en la ebanistería. Esta nueva generación de Oceanis busca el espacio, aprovechando todos los volúmenes ocultos. Existen suficientes estantes y sitios en lo que estibar lo necesario incluso para programas de largos cruceros. La cocina es amplia y bien diseñada y permite encajarnos durante la navegación escorada entre la encimera y el mueble que soporta el doble fregadero, para poder trabajar en ella de forma cómoda y segura.

La cabina de proa es inmensa con cama dimensionada para los propietarios más altos, amplio espacio por ambos lados y baño de generoso tamaño, con cabina de ducha independiente. Cama perfecta para dormir en puerto o fondeados, pero no durante la navegación de ceñida, ya que acabará usted fuera de ella, aunque para estos casos se pueden prever algunas colchonetas encajadas a ambos lados.  En todo caso se trata de un velero imponente de 15 metros de eslora y casi cuatro metros y medio de manga. Su motorización Yanmar de 110 CVs le permite llegar a los 8 nudos de crucero y casi 10 nudos a máxima.